La apelación inconsciente y recurrente del maestro por la falta de materiales, medios y equipo en la escuela, evidencia una calidad magisterial en penuria. Incluso, algunos maestros interlocutores han insinuado que la prestación de medios, materiales y recursos intelectuales es un derecho adquirido, no un deber. Así es como el maestro se libera de forma elegante del empoderamiento de medios, materiales y recursos, y se exculpa del fracaso escolar estudiantil. Más información >>>